Page 91

gastrolat 2 2017

Artículo de Revisión Disp lasia de a lto gra do e n es ófago de Barrett - F. Fluxá G . Introducción Esófago de Barrett (EB) es la presencia de metaplasia columnar en el esófago asociado a la presencia de metaplasia intestinal. Constituye una condición pre maligna para adenocarcinoma (AC). El riesgo de progresión de EB no displásico a AC es 0,12 a 0,4% por año. Este riesgo aumenta cuando aparece displasia, para bajo grado es 1,7% anual y para la de alto grado el riesgo de progresión a AC es estima entre 5,6 a 6,6% anual1. Se sabe que los pacientes con EB que progresan hacia AC, presentan antes displasia en diferentes grados. Displasia de bajo grado (DBG) a displasia de alto grado (DAG), acumulando progresivamente alteraciones genéticas. El seguimiento, por lo tanto, está destinado a encontrar estas displasias para acceder a una terapia antes de desarrollar una lesión maligna propiamente tal. Los avances en el área endoscópica han permitido desarrollar terapias muy seguras y efectivas, que han facilitado el manejo de estos pacientes Terapias de erradicación endoscópica Al día de hoy, se acepta que los pacientes con Esófago de Barrett sin evidencias de displasia sólo deben ser sometidos a seguimiento. La terapia endoscópica se reserva para aquellos que tienen displasia y neoplasia intramucosa. En estos casos es necesario tratar la lesión en particular, sin embargo, el resto del epitelio columnar también debe ser erradicado pues se sabe que tiene un alto riesgo de desarrollar lesiones en el futuro. Ablación por radiofrecuencia El sistema más conocido para esta técnica es el Barrx™ que incluye un generador de energía, un balón para tratamiento circunferencial Barrx™ 360 (Figura 1) o un dispositivo llamado Barrx™ 90 para tratamiento focal, cuyo catéter actual puede pasar por el canal del endoscopio (Figura 2) a diferencia del modelo anterior que se adaptaba por afuera del endoscopio (Figura 3). Consiste en la aplicación de una energía a los tejidos por períodos cortos de tiempo, logrando una penetración limitada a la muscular propia sin dañar la submucosa o capas más profundas, con lo que el riesgo de sangrado y estenosis es muy bajo. Además, permite la mucosectomía, levantando la submucosa al inyectar ésta, en casos en que se requiera alguna cirugía endoscópica resectiva posteriormente. Resultados En una revisión sistemática aparecida el 2013 con 3.802 pacientes sometidos a ablación por radiofrecuencia (Radiofrequency Ablation-RFA) EB sin displasia, DBG, DAG y AC intramucoso, los resultados mostraron erradicación completa de la metaplasia intestinal en 78% de los pacientes (95% IC, 70-86%) y completa erradicación de la displasia en 91% (95% IC, 87-95%)2. En otro estudio del grupo de Registro Nacional de Halo en Reino Unido, 335 pacientes (72% DAG, 24% AC intramucoso y 12% DBG) fueron seguidos por un año luego de ser sometidos a RFA. Se logró erradicación completa de metaplasia intestinal en 62%. Para DAG fue 86% y para toda displasia, 81%. Sólo 10 pacientes (3%) progresaron a cáncer invasivo3. Respecto a lo que sucede en el seguimiento, hay algunas publicaciones como un estudio norteamericano que luego de un seguimiento a 2 años de 106 pacientes, mostró erradicación completa de displasia en 95% y de metaplasia intestinal en 93%. De ellos, 56 pacientes fueron seguidos a 3 años, viéndose 98 y 91% de erradicación, respectivamente. Sin embargo, es importante puntualizar que en este grupo de pacientes hubo nuevas aplicaciones de radiofrecuencia lo que demuestra que esta terapia no libera a los pacien- Figura 1. Figura 2. Figura 3. Gastroenterol. latinoam 2017; V ol 28, Supl N º 1: S 16- S 20 S 17


gastrolat 2 2017
To see the actual publication please follow the link above