Semblanza: Profesor Dr. Juan Carlos Glasinovic Radic

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Rodrigo Zapata L.1

Información y Correspondencia
Filiaciones
1Jefe, Unidad de Gastroenterología, Clínica Alemana de Santiago.Profesor de Medicina, Facultad de Medicina, Universidad del Desarrollo.Ex Presidente Sociedad Chilena de Gastroenterología (2012-2014)

Recibido: 11-01-2022
Aceptado: 04-06-2022
©2022 El(los) Autor(es) – Esta publicación es Órgano oficial de la Sociedad de Anestesiología de Chile


Gastroenterol. latinoam. Vol. 33 Núm. 1 pp. 61-64|https://doi.org/10.46613/gastrolat2022001-08
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Fallece en Santiago, el 14 de Octubre del 2021, a los 81 años

Passed in Santiago, on October 14, 2021, at the age of 81

El Dr. Juan Carlos Glasinovic nació el 23 de noviembre de 1939 en el Hospital de Chuquicamata, en la ciudad de Calama, en el seno de una familia croata, hijo del Dr. Carlos Glasinovic y de Ljubica Radic . De niño estuvo interesado en la posibilidad de estudiar Medicina, bajo la influencia de su padre con quien siempre mantuvo una estrecha relación. En una entrevista realizada por la Sociedad Chilena de Gastroen- terología en 2015 recordaría: “Mi padre era durante ese tiempo casi el único médico en Calama, tenía la admiración de toda la gente, yo lo veía trabajar y lo acompañaba. Una de sus funciones como médico del ferrocarril de Antofagasta a Bolivia era hacer un recorrido una vez al mes por las estaciones hasta la frontera en Ollagüe. Un par de veces lo acompañé y eso se me grabó mucho en la memoria”.

Realizó sus estudios en la escuela primaria de Calama y a los 10 años inició su internado en el Colegio jesuíta San Luis de Antofagasta, donde fue un destacado alumno, y disfrutando un período que recordaba siempre con mucho cariño.

En 1957 se trasladó a Santiago para estudiar Medicina en la Pontificia Universidad Catolica de Chile (PUC). De ese período recordaba “Éramos muy pocos alumnos, alrededor de 20 a 24 y eso permitía un estrecho contacto, una enseñanza tutorial. Los cursos teóricos ocupaban un lugar bastante secundario, pasábamos toda la mañana y a veces la tarde en un grupo de cinco o seis con un monitor que era de la gente más calificada”. Durante sus estudios, fue demostrando su gran capacidad de liderazgo llegando a ser presidente del Centro de Alumnos de Medicina de la PUC (1961), en tiempos difíciles de la reforma universitaria. Hubo profesores que lo marcaron muchísimo en sus posteriores decisiones para estudiar Medicina Interna y luego Gastroenterología como el Profesor Dr. Ramón Ortúzar (en ese entonces Jefe de Medicina Interna), el Dr. Enrique Montero, el Dr. Vicente Valdivieso, el Dr. Carlos Quintana y el Dr. Jorge Gumucio. Recuerda de ese período formativo que “había mucha discusión para sacar el máximo de provecho a los datos que uno podía obtener de la historia clínica y eran particularmente destacables las reuniones de anatomía patológica, en las cuales se presentaba un caso de un paciente fallecido y se discutía cuál había sido la evolución clinica del paciente”.

Posteriormente se formó en Medicina Interna, y junto al Dr. Ivan Marinovic (íntimo amigo de la vida), emprendieron su período post beca en su querido Hospital Dr. Sótero del Río. En esos años (fines de los 60’s), “comenzaron a utilizarse los endoscopios en el hospital que se caracterizaba por atender a una gran cantidad de pacientes de escasos recursos, que a su vez presentaban una gran diversidad de patologías”. Luego, obtuvo una beca de postgrado en el Hospital Beujon de París (Francia), donde estuvo entre 1971-1974. Durante su etapa en Francia, el Dr. Glasinovic se dedicó a investigar la secreción biliar, pues según comenta “habíamos definido que una de las cosas que denotaban cierto progreso en la medicina era buscar cuáles eran aquellas materias que merecían una especial atención por la frecuencia que tenían en la población chilena y era evidente, que había una frecuencia de cálculos biliares muy superior al resto del mundo, lo que era muy curioso”.

A su vuelta a Chile, se reincorporó al Departamento de Gastroenterología de la PUC, donde desarrollo una fructífera carrera académica, llegando a ser profesor titular de Medicina. Continuó trabajando en investigación clínica en el área de la litiasis vesicular y de la secreción biliar (colestasia gravidi- ca) y en el área de la docencia, que era uno de sus intereses preferidos, siempre rodeado de alumnos y colegas jóvenes que disfrutaban de su gran capacidad docente y de grata conversación. “Con Iván Marinovic, con quien estábamos en paralelo trabajando, pusimos gran empeño en la enseñanza de la medicina interna y de la gastroenterología, siguiendo el modelo de nuestros maestros”. Durante varias décadas influyó decisivamente en varias generaciones de médicos jóvenes, gastroenterólogos y hepatólogos.

Dr. Glasinovic junto a su esposa Solange Ver- non (Congreso Chileno de Gastroenterologia, 1992).

Dr. Juan Carlos Glasinovic junto a su gran amigo Dr. Iván Marinovic (Congreso SCHGE 1993)

Dr. Juan Carlos Glasinovic (arriba a la derecha), junto a equipo médico y paramédico del Departamento de Gastroenterología de la PUC. Dres. Carmen Covarrubias, Carlos Quintana, Vicente Valdivieso, Carlos Monge, Flavio Nervi, Luigi Accatino, Antonio Rollán, Ivan Marinovic, José Chianale, Marco Arrese, Robinson González, Sergio Carvajal, Atilio Rigotti, entre otros. (1994)

Dr. Glasinovic, junto a sus grandes amigos del Hospital Sótero del Río: Drs. Claudio Canals, Felipe Finkelstein, Eduardo Ríos, Fernando Gutiérrez, René Sánchez (QEPD) y José Brkljaca (QEPD), entre otros (fotografía 1996).

Durante una sesión científica de Congreso de Gastroenterología, De izquierda a derecha Dres. Joaquín Palma, Javier Brahm, y Juan Carlos Glasinovic (1998).

En paralelo, ejerció la Medicina en el Servicio de Gastroenterología de Clínica Alemana por varias décadas, donde llegó a ser Jefe de la Unidad, y desde 2002 contribuyó desde la docencia de Pregrado en la formación de médicos en la naciente Facultad de Medicina de la Universidad del Desarrollo como Profesor titular.

Sus variados intereses, su gran calidad humana, simpatía, calidez, amistad, generosidad y liderazgo lo condujeron a ser Presidente de la Sociedad Chilena de Gastroenterología en el año 2000 y de la Asociación Latinoamericana para el Estudio del Hígado (ALEH 2000-2002), y más tarde en 2007 recibió el reconocimiento “Premio Invitado Nacional” por sus grandes aportes a la Gastroenterología nacional tanto en investigación como docencia.

Formó una hermosa familia con su esposa Solange Vernón, enfermera, y juntos tuvieron 4 hijos muy exitosos en sus ámbitos particulares: Juan Pablo (Abogado), Nicolas (emprendedor empresario), Marie Noel (Psicóloga) y Esteban (médico Gastroenterólogo). En cada uno de sus hijos, uno ve esa mirada inteligente, calidez y empatía que siempre tenía Juan Carlos. Con Esteban sigue su presencia en la Gastroenterología nacional, un desafío muy grande.

Una de sus pasiones era el Sur de Chile y viajaba con cierta regularidad a Panguipulli a disfrutar la naturaleza, el descanso y la meditacion. Varios de quienes hemos sido sus discípulos en la Medicina pudimos disfrutar del café entretenido, de conversaciones largas, de una puesta de sol en Panguipulli hablando sobre la medicina, la amistad, la situación política, la historia y de la vida y sus conflictos y pudimos comprobar su gran humanidad, optimismo, generosidad, sencillez, humildad, gran tolerancia y sapiencia. Donde estuviese Juan Carlos, se respiraba un ambiente grato y cálido. Con frecuencia decía: “el único problema que existe, es aquel que puede resolverse, pues cuando no es así, deja de ser un problema”.

Tenía intereses fuera del campo netamente médico, que lo hacían una persona muy completa y multifacética y que incluía la fotografía, la creación literaria (ganó el “Primer Curso literario y artístico del Centro de Humanidades de la Facultad de Medicina de la Universidad del Desarrollo en 2011 con su cuento “Mal de ojo” y luego otros varios premios en cuentos como “Salir de la Ciudad” y “Cuestión de Piel”) y debutó como director de teatro en 2014 con su obra “Pieles” (Sept/2013) con varias presentaciones en Chile, en que narraba desde una mirada científica, la historia de una familia rusa que desarrollaba un negocio de pieles en decadencia, mostrando los misterios de la muerte, la liberación, y conflictos de identidad, mediante metáforas de los abrigos de la piel. En uno de sus pasajes, es particularmente descriptivo de la relación entre dos personas frente a la enfermedad:

Bajo la Presidencia del Dr. Glasinovic a cargo de la Asociación Latinoamericana para el Estudio del Hígado (ALEH), se realiza Congreso ALEH en Santiago, Chile. Centro eventos Diego Portales. De izquierda a derecha: Dres. Juan Carlos Glasinovic (Pdte. ALEH), María de los Ángeles Gatica (Coordinadora Congreso Chileno SCHGE), Juan Carlos Weitz (Pdte. SCHGE), Rodrigo Valderrama (Coordinador Congreso ALEH) y Rodrigo Zapata (Coordinador Congreso ALEH) (Noviembre, 2002)

Iván : En verdad, el viaje fue la ocasión en que (joven) nos sentimos más unidos; ambos, él y yo, liberados de nuestros roles cotidianos y sobre todo de nuestros silencios. Ahora que él está muriendo, siento que nos faltó tiempo.

Fidel : Siempre falta tiempo; por eso no hay que (hombre dejarlo pasar. Pero, eso implica derribar mayor) barreras, particularmente aquéllas que no derivan de una situación conflictiva, sino de la sedimentación de banalidades y perezas del espíritu.

Iván : Tienes razón. Perdí esa oportunidad… y muchas otras. Ahora es demasiado tarde.

Fidel : No necesariamente. La relación entre dos seres no es sino parte de un tejido de muchas hebras. La ausencia de Sergei afectará el tejido entero y pondrá en primer plano tus responsabilidades. Aquí estoy para ayudarte.

Su vocación de docente la resumió una vez como: “Lo que constituye la máxima de los principios de la educación es el trasmitirles la pasión y la rigurosidad por lo que están haciendo; y, por otro lado, dejar que los jóvenes estudiantes se expresen. Educar significa dejar que las personas ejerzan su libertad de acuerdo a padrones de comportamiento que están caracterizados por las virtudes que debe tener el médico. Yo creo que es importante que la gente joven oiga hablar de estas cosas, porque uno da por sentado lo que son los

Fotografía de Ex presidentes de la Sociedad Chilena de Gastroenterología (SCHGE). Sentados de izquierda a derecha: Dres. Juan Carlos Weitz, Ricardo Santander, Juan Calos Glasinovic, Javier Brahm y de pie Dres. Fernando Fluxa, Zoltan Berger, Roque Sáenz, Rodrigo Zapata, Claudio Navarrete (Pucón, 2014).

Sentados de izquierda a derecha: Drs. María de los Ángeles Gatica, Juan Carlos Glasinovic y Paula Vial. De pie Dres. Rodrigo Zapata y Felipe Finkelstein (Despedida Clínica Alemana, 2015).

Dr. Glasinovic, junto al Dr. Pablo Vial (Decano Facultad de Medicina, UDD), durante ceremonia homenaje (2015).

Dr. Juan Carlos Glasinovic, en su debut como dramaturgo, en la obra “Pieles” (2016), con los actores médicos y estudiantes de Medicina.

principios y las virtudes, importantísimas en los profesionales de la salud. Los médicos jóvenes tienen que saber que, además de aprender técnicas, procedimientos o destrezas, tienen que encuadrar esas actividades dentro de un comportamiento esencial que es el del médico y que si no lo hacen, no pueden andarse quejando después de ser tratados como burócratas de la salud”.

Para quienes hemos tuvimos la gran oportunidad de conocerlo, como exalumnos, discípulos y luego amigos, es sin duda, una gran pena despedir a quien fue un médico excepcional, sabio, poeta, gozador de la vida y agradecerle su constante entrega, cariño, dedicación, consejos, amistad y calidad humana: un ejemplo a seguir para las futuras generaciones de Gastroenterólogos en nuestro país.

Hasta siempre Juan Carlos…

Referencias

1. Jimenez C, Zapata R. Entrevista a Dr. Juan Carlos Glasinovic Radic, Presidente Sociedad Chilena de Gastroenterologia (SCHGE) 2000-2002. Gastroenterol Latinoam. 2015;26:248–56.

2. https://www.savalnet.cl/mundo-medico/entrevistas/11327.html

3. https://www.savalnet.cl/mundo-medico/noticias/reconocido-gastroenterologo-debuta-como-director-de-teatro.html